Se dice que dibujé antes de caminar, crecí en una casa donde se coleccionaban comics y siempre tuve en claro que iba a vivir de eso.
Me limité al dibujo hasta el año 2014, cuando empecé a tatuar. El tatuaje me acercó a las acuarelas y eso fue mutando a otras formas y materiales.
Actualmente en la pintura trabajo más que nada en acrílico sobre lienzo pero me gusta experimentar con cualquier material que se me presente, soy autodidacta por decisión pero siempre disfruto probar y aprender cosas nuevas.
También hace unos dos años vengo armando una serie de objetos intervenidos como una forma de unir la cultura del tatuaje con la decoración.
Lo más significativo que puedo decir de mí misma como artista es que me divierto, creo cosas que me harían feliz ver y que no veía.